lunes, 27 de mayo de 2013

Analisis : Metro Last Light

Metro Last Light

Oscuro, lúgubre y claustrofóbico. 4A Games vuelve a demostrar que en cuanto a crear experiencias shooter extremas conoce pocos rivales, y nos ofrece otro gran videojuego bajo el sello Metro. Artyom retorna a su peor pesadilla y combate en las profundidades de una Rusia post-apocalíptica no sólo a mutantes y criaturas imposibles, sino también al más peligroso de los enemigos... El ser humano.

Hacerse con un hueco en el populoso género shooter pasa a día de hoy o por hacer las cosas muy bien o por ofrecer algo rompedor y novedoso. Los chicos de 4A Games tratan desde su inicio como estudio de hacer las dos cosas al mismo tiempo, cosa harto difícil sobre el papel, pero sin embargo ya lo consiguieron con éxito con Metro 2033: un título de 2010 basado en la obra literaria homónima de Dmitri Glujovski que logró cuajar un título aplaudido con unanimidad bastante generalizada tanto por el público como por la crítica.
Las ventas garantizaron una segunda parte, y la viabilidad económica de una serie que tras la bancarrota de THQ sería comprada a comienzos de este año por unos Deep Silver que se limitaron a hacer lo que debían: tratar de que los desarrolladores notaran el cambio lo menos posible y, sencillamente, dar algo más de tiempo al estudio ruso para terminar el título de la mejor forma posible. Precisamente una de las pocas pegas que se le interpelaron a su predecesor fue la del acabado, así que en esta ocasión parecía más que razonable pensar en lo necesario que resultaría un plus en este sentido que garantizaría ese plazo extra de desarrollo que se tradujo en un retraso.

Ahora, con el juego en las manos, tenemos un producto definitivamente más redondo en términos de pulido e incluso mecánicas de combate. Un lanzamiento que puede haber perdido algo de frescura y que, definitivamente, es mucho más directo y accesible que su predecesor, pero que en definitiva sigue conservando ese componente único que hace que no se parezca a nada. Last Light no sólo es una segunda parte de lo más recomendable, sino que además es uno de esos lanzamientos que nos recuerdan una vez más que el género shooter no tiene por qué renunciar a los conceptos únicos ni a las ambientaciones cuidadas con pasmoso buen gusto.
 
 
 Bajo un Cielo de Hormigón
En el nuevo Metro volvemos a ser Artyom, el ya veterano héroe de acción de la serie, que vuelve a vivir aventuras y desventuras en las redes de túneles subterráneos de Moscú. Ahí se refugia la humanidad tras un evento post-apocalíptico que ha dejado a nuestra raza diezmada y condenada a malvivir en un subsuelo plagado de amenazas, y donde las salidas al exterior significan la muerte. Todo comienza acto seguido de lo visto en Metro 2033, recogiendo su hilo narrativo justo donde aquel lo dejó. Ahora el protagonista está afiliado en uno de los distintos bandos entre los que se han dividido los supervivientes de esta catástrofe postapocalíptica, un tenebroso y deprimente punto de partida que se presenta una vez más como una inmejorable base para una apasionante propuesta argumental que comienza de forma demoledora.
Si jugamos en su momento al original todo eso que ganamos en términos de contexto, pero si no lo hicimos no importa tanto como pudiera parecer puesto que lo que se nos cuenta en Last Light es un arco argumental completamente nuevo. Con fuertes raíces con su predecesor, lógicamente, el título no impide sin embargo su disfrute como ente independiente. Nada más comenzar, de hecho, se nos pone en antecedentes de la situación general con una bella cinemática, y poco a poco iremos descubriendo en los primeros minutos que el protagonista ha llevado a cabo algunas acciones de cuestionable ética sobre la inocua raza mutante de Los Oscuros. 4A Games, de este modo, adopta de forma obligatoria uno de los finales del original como banderazo de salida, el más oscuro sin duda, pero que sin embargo deja una pequeña aureola de esperanza en forma de un superviviente de esa especie al que deberemos perseguir y localizar.

Es imposible contar nada más sobre el juego sin incurrir en los siempre evitables spoilers, de manera que ahí lo dejamos. Sólo diremos que la aventura sigue claramente el planteamiento dividido en breves capítulos de su predecesor, y planteándonos una línea recta a recorrer con pequeños recovecos que investigar para tratar de ofrecer esas pequeñas gotas de exploración que tan buenos momentos nos ofrecieron en la primera parte. Al comienzo "trabajaremos" para La Orden, una organización formada por veteranos de los comandos de fuerzas especiales rusos, pero poco a poco los incidentes se irán sucediendo para vapulear nuestro camino y distraernos constantemente de nuestro objetivo último, y para ponernos en contacto con el resto de peligrosas facciones que moran los subterráneos.
 
 
 Moscú 2034 -Gráficos y Tecnología-
Desde la perspectiva visual, Metro: Last Light es uno de los grandes juegos de lo que llevamos de año en PC, y también un juego de gran aspecto en Xbox 360 y PlayStation 3. Su aspecto gráfico y tecnológico es rotundo también en estas versiones, y aunque a su nivel, sigue lleno de pequeños detalles brillantes. Sin embargo si en ordenador es su tratamiento de la iluminación lo que lo hace trascender y contarse entre los títulos más avanzados que pueden disfrutarse en estos momentos, en consolas el programa presenta una luz algo más plana. El juego sigue haciéndose acreedor de un gran carácter y una muy buena personalidad visual, pero el impacto del impresionante efecto lumínico se pierde por el camino en las máquinas de Sony y Microsoft que, sin embargo, mejoran notablemente lo visto fuera de ordenadores en su predecesor.
Por lo demás, y en líneas generales, el programa presenta un aspecto rotundo en todos los elementos que componen su faceta estética. Los personajes han experimentado un gran avance desde lo visto en 2010 con el original, atesorando ahora un nivel de detalle, una carga poligonal, una calidad de las texturas y unos movimientos y animaciones que han disparado su calidad y realismo de forma notable. Ahora es un verdadero placer acercarse a nuestros interlocutores para tener una conversación con ellos, y eso es algo que se agradece en un título en el que la inmersión es tan importante como en el que nos ocupa. Las criaturas nos deparan idénticas conclusiones en cuanto a la mejoría generalizada, ya no tenemos entre manos únicamente al limitado número de modelos de su antecesor, sino que el número ha aumentado notablemente con un nivel de detalle también mucho mayor.
 
Por otra parte los escenarios ya contaban con un acabado estupendo en el pasado, así que 4A Games se ha limitado a repetir el buen trabajo llevado a cabo por aquel entonces. De este modo las conclusiones son similares, con los mismos contrastes entre el deprimente subsuelo y el decrépito mundo exterior, y con idéntico gusto por la épica del "Destroyed Beauty" que tan bien ha estado funcionando en esta generación, desde la apertura de fuego que llevó a cabo en este sentido Gears of War. Moscú en todo su majestuoso esplendor se recorta en el horizonte del exterior, con los bellos rayos de luz bañándolo para dibujar un siniestro paraje mitad recuerdo de su glorioso pasado y mitad realidad de su decrépito aspecto actual. ¿Los túneles? Gran trabajo también el que exhiben, aunque con un prisma muy distinto. Hay también más variedad en esta ocasión, con distintos tipos de instalaciones ( industriales, militares, civiles...) que cumplen bien su cometido a la hora de proponer distintos contextos para la acción.
A nivel tecnológico el juego también ofrece buenos resultados, aunque en esta ocasión también lastrados por una cierta falta de pulido. En Last Light estos problemas son menos alarmantes que en el 2033 original, sin embargo siguen estando presentes y afectan no sólo a bugs de distinta consideración, sino también a elementos relacionados con el acabado de la inteligencia artificial entre otros aspectos. En el resto de elementos de este apartado las noticias son fantásticas, con abundantes elementos muy bien implementados para dotar de realismo a las bellas estampas que se nos muestran en pantalla, además de con unas efectos y unos tratamientos de impactos también muy superiores a lo que vimos hace tres años en el original. Mención especial a las físicas de una edición para compatibles muy superior y donde los entornos destructibles ofrecen sus mejores resultados. Todos estos aspectos no sólo están destinados a hacer el título más valioso en cuanto a su aspecto, sino también a mejorar su rendimiento jugable y sus posibilidades como shooter.
 
La optimización, por otro lado, ofrece buenos resultados también en consolas, aunque con las lógicas limitaciones que son ya inevitables a estas alturas de generación. Lejos queda el absoluto dispendio de la versión para compatibles, así que aquí nos contentamos con un lanzamiento muy bueno aunque no sobresaliente. ¿Los motivos? A la iluminación notable pero más discreta a la que hemos hecho referencia con anterioridad se suma también unas físicas inferiores, un tratamiento de sincronía vertical que brilla desagradablemente por su ausencia y un antialiasing muy discreto. Las texturas son bastante aceptables, y la nitidez se cuenta entre lo que esperábamos, con unos efectos a buen nivel.
En última instancia, y ya abordando el tema del sonido, el juego ofrece un gran resultado. La banda sonora cuenta con un muy buen nivel en términos musicales, con partituras más o menos inspiradas pero que definitivamente cumplen su función a la perfección. Los efectos de sonido están también muy bien terminados, y el título llega doblado al español con un nivel de dramatismo y una elección de voces a una altura más que aceptable.
 
 
 
Valoración de Metro: Last Light
Metro: Last Light es una de las muy buenas noticias que nos deja el género shooter este año, y es un título que no defraudará a los fans de las experiencias cargadas de personalidad. Su rico universo, su impresionante apartado gráfico y su apasionante punto de partida se cuentan entre las mejores virtudes de un juego más accesible y directo que su primera parte. 4A Games sigue reivindicándose como uno de los estudios a seguir en la acción en primera persona.


                                                                                                            Fuente:3djuegos
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario